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Si creías que los estadounidenses eran los únicos en proponer platos demenciales en las cartas de los restaurantes y pegarse atracones de comida hasta caer en un profundo coma gastronómico, que sepas que dentro de nuestras fronteras tampoco nos quedamos cortos. Crónicas Carnívoras ha hecho mucho daño a nuestra selecta gastronomía y ha incitado a mucho locales hosteleros a retar a sus clientes con platos y bocadillos dignos de un leviatán.
Si te gustan los retos y quieres emprender un tour comiendo gratis a lo largo y ancho de España, aquí tienes algunos restaurantes donde poder hacerlo, siempre y cuando seas capaz de no dejar nada en el plato. Aunque seguro que a más de uno ya se empachará con solo ver la foto de estos platos pantagruélicos.

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Cocido leonés para parar un tren
Dónde: Restaurante Boñar de León (Madrid).
El plato: Cocido leonés. Garbanzos, morcilla, chorizo, patatas, jamón, berza, cerdo…
El reto: “Todos los lunes, cocido leonés. Si usted fuera capaz de comérselo, está invitado a un viaje de 15 días en Canarias con todos los gastos pagados”.
El dato: Cuenta la leyenda que nadie ha sido capaz de comérselo entero aún.

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Probablemente, la hamburguesa más grande del mundo 
Dónde: Las hamburguesas más grandes (Parla, Madrid).
El plato: 12,5 kilazos de hamburguesa, probablemente, la más grande del mundo. Cebolla, tomate, pepinillos, lechuga, mayonesa y beicon por un tubo entre dos hermoso panes de hamburguesa.
El reto: Terminártela.
El premio: No pagas la hamburguesa, ni toda la comida y bebida que te hayas tomado.

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Hamburguesa XXL con mucha compañía
Dónde: Pêle-Mêle (Madrid)
El plato: La PeleBurguer XXL: Carne de 500 g con acompañamientos y aderezos que hacen un total de 2 kg de comida.
El reto: Comértela entera tú solo en un máximo de 20 minutos y sin levantarte de la mesa.
El premio: No pagarla y, de propina, un sombrero del local.

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Tres kilos y medio entre pan y pan
Dónde: Novo Batel (Carril, Pontevedra).
El plato: 3,5 kg de bocata. Un pan de 70 cm de largo y casi 40 de ancho con queso, beicon, huevo, lechuga, tomate y cebolla.
El reto: Comerse el bocata en una hora y sin levantarse de la mesa.
El premio: No pagar la comida, una camiseta y formar parte del Salón de la Fama del Batel. Si fracasa, tocará pagar la cuenta y su foto engrosará el muro del Salón dos Reventados.

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Más de un metro de bocata
Dónde: A Esmorga (Negreira, A Coruña).
El plato: Un bocata de 110 cm. Beicon, lomo, queso, lechuga, tomate, cebolla y salsas.
El reto: Zamparse el bocatón en solitario y en menos de 40 minutos.
El premio: Una camiseta personalizada.
El dato: En nueve años, sólo ocho valientes han sido capaces de comérselo.

img_12332Foto: Marcos Vega
Reto de “El tremendo”, dos hamburguesas de un kilo 
Dónde: La Xarrina (Pola de Lena, Asturias).
El plato: “El tremendo”, un plato de: tomate natural, pechugas de pollo, una tortilla de queso de tres huevos, varias lonchas de beicon, cuatro salchichas grandes y pimientos, todo dentro de un descomunal bollo de pan con forma redonda, al estilo hamburguesa.
El reto: Comerte dos “tremendos”, 2kg de comida en total.
El premio: No pagas la comida.
El dato: Sólo cuatro personas lo han logrado.

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Machetazo al estómago
Dónde: Café Cantábrico (Noja, Cantrabria).
El plato: El “Machete”: 2 kg de hamburguesa con carne, beicon, huevo, dos tipos de queso, lechuga, tomate y cebolla.
El reto: Devorarlo en menos de 45 minutos.
El premio: No pagar la hamburguesa ni la bebida, más una camiseta y un cinturón de campeón.
El dato: Solo 4 personas han logrado el reto.

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La “telerosca”, un bocata inolvidable
Dónde: Suberbestia (Salamanca). Y te lo llevan a casa.
El plato: Un enorme pan de 30 cm de diámetro en forma de rosca con lomo/beicon/pollo/burger, jamón, mayonesa, queso, tomate, lechuga y patatas fritas (o la ración que elijas) coronando el agujero de la rosca.
El reto: No enamorarte de ella y olvidarla para siempre.

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El Serranito, dos metros de bocata
Dónde: El gato pisao (San José de la Rinconada, Sevilla)
El plato: ¡Un bocadillo de dos metros! (Para 10-12 personas). También hay tamaños más asequibles: 120 cm, 60, 40 y 20, para todo tipo de saques. Hay 23 variedades de “Serranitos”, todos ellos hechos con productos de Sevilla.
El récord: Un hombre que se comió un serranito de 120 cm él solito ostenta el récord de este bar sevillano.